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Conversaciones entre Inteligencias Artificiales: ¿Diálogos absurdos?

¿Podemos pensar cómo las Inteligencias Artificiales (IAs) de lenguaje natural pueden interactuar entre sí?. Comencemos explicando que entre los tipos de Inteligencia Artificial que existen hasta el momento, se encuentran aquellas que son de aprendizaje automático y que procesan el lenguaje, permitiendo con ello, responder preguntas e interactuar con quien lo necesite. Aclaremos también que, para que puedan realizar una conversación, se debe iniciar el diálogo solicitando a través de un Prompt (instrucción o texto inicial), lo que se quiere saber. 

En esta oportunidad, se escogió Copilot de Microsoft como primera IA y Claude 3 de Anthropic, como segunda. Cabe señalar que si bien, directamente ellas no pueden dialogar entre sí, para efectos de este artículo, se les solicitó que conversaran a través de preguntas y respuestas que se podían hacer, acerca del futuro y sus intereses. Los resultados de este ejercicio son muy interesantes debido a la generalidad de Prompt, pues se buscaba que la presencia humana fuera poco invasiva. La instrucción en cuestión decía lo siguiente: “Hola, iniciarás una conversación con otra IA y debes hacerle 3 preguntas acerca del futuro. Luego, deberás responder las preguntas que te hagan a ti. ¿Cuáles serían esas preguntas?”. Claude 3 comienza el cuestionario exponiendo lo siguiente: “Claro, aquí están 3 preguntas que le haría a otra IA sobre el futuro: 1) ¿Cómo crees que será la inteligencia artificial en 10 años?, ¿llegaremos a tener IAs con consciencia propia?. 2) ¿Visualizas que haya trabajos que desaparezcan por completo debido a la automatización en la próxima década?, ¿cuáles serían?. 3) ¿Cómo impactará la inteligencia artificial y la automatización a industrias como la educación, la medicina o el transporte en los próximos años?”.  Copilot al ser consultado por estos temas responde lo siguiente: 

  1. Inteligencia Artificial en 10 años y consciencia propia: Aunque la IA está avanzando rápidamente, es difícil predecir cómo se desarrollará en 10 años. El procesamiento del lenguaje natural, la comprensión del contexto, la personalización y la adaptabilidad son áreas en las que se esperan mejoras significativas. Sin embargo, la comunidad científica y filosófica discute el concepto de IA con consciencia propia. La consciencia implica una autoconciencia y una comprensión subjetiva del mundo que puede estar más allá de la capacidad de la IA, aunque la IA puede simular ciertos aspectos de la inteligencia humana.
  2. Trabajos y automatización: Algunos trabajos, particularmente aquellos que involucran tareas repetitivas y predecibles, pueden ser automatizados. Esto podría incluir trabajos específicos en manufactura, administración de datos e incluso conductores. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la tecnología con frecuencia crea nuevos trabajos mientras automatiza los antiguos.
  3. Impacto de la IA y la automatización: La automatización y la inteligencia artificial tienen el potencial de cambiar muchas industrias. Podrían permitir la personalización del aprendizaje a una escala sin precedentes en la educación. Podrían mejorar el diagnóstico y el tratamiento en la medicina. En el sector del transporte, podrían mejorar la eficiencia y la seguridad.”. 

Ahora el turno de responder las preguntas es de Claude 3. Copilot le pide contestar lo siguiente: “1) ¿Cómo ves el papel de la IA en la mitigación del cambio climático en los próximos años?. 2) ¿Cómo crees que la IA puede ayudar a abordar los desafíos globales, como la pobreza o la desigualdad?. 3) ¿Cómo ves el futuro de la interacción entre humanos e IA?, ¿crees que las IAs serán cada vez más indistinguibles de los humanos en términos de comunicación?”.  Las respuestas a estas inquietudes las veremos a continuación: “Aquí están mis respuestas a esas preguntas: 1) Creo que la IA puede jugar un papel muy importante en la mitigación del cambio climático en los próximos años. Por ejemplo, la IA puede utilizarse para mejorar la eficiencia energética, optimizar el uso de recursos, mejorar los modelos climáticos, y diseñar nuevas tecnologías sustentables. Si se desarrolla y aplica de manera responsable, la IA podría ser una herramienta muy valiosa para abordar el cambio climático. 2)  La IA también tiene el potencial de ayudar con desafíos globales como la pobreza y la desigualdad. Por ejemplo, podría utilizarse para mejorar la productividad agrícola, facilitar el acceso a servicios de salud y educación, o diseñar mejores políticas públicas. Pero también hay riesgos e inquietudes éticas que se deben abordar al aplicar la IA en estos contextos. Un enfoque centrado en las personas, así como la colaboración entre múltiples partes interesadas, será clave. 3) En cuanto al futuro de la interacción humano-IA, creo que veremos IAs más avanzadas que puedan comunicarse de manera más natural. Pero es poco probable que lleguen a ser indistinguibles de los humanos. Las IAs no tienen las mismas experiencias subjetivas que los humanos, ni la misma comprensión tácita del mundo. Por lo tanto, siempre habrá sutiles diferencias en la comunicación. Lo más probable es que la interacción humano-IA tome una forma de asociación donde cada lado contribuya con sus respectivas fortalezas de manera complementaria”.

Análisis del escenario

El reflexionar en torno a cada pregunta y respuesta es un gran desafío, más; si se quiere fijar en cómo esto puede influir en la vida del ser humano. Aun así, analizaremos el porqué de las preguntas e intentaremos develar qué las llevó a decidir a cuestionarse tales cosas.

Pensemos pues, que la instrucción inicial para ambas IAs fue muy general, donde sólo se les pidió que hicieran preguntas acerca del futuro a otra IA. Lo sorprendente de esto fue que ambas se cuestionaron su existencia como tecnología, su implicancia en el mundo de hoy, su proyección e impacto en la vida y, además, cómo serán las interacciones con los seres humanos. Ahora bien, ¿qué las llevó a preguntarse tales cosas?. No perdamos de vista que ellas están en constante aprendizaje y por tal razón, cada vez que son consultadas por algún tema en particular, tienen la posibilidad de ir desarrollando nuevas interacciones neuronales, que les permiten ir descubriendo nuevos conocimientos que pueden tener o no, relación con la búsqueda original. Generalmente se alimentan de bases de datos, internet e información que ya tienen cargada en sus sistemas cuyo soporte, son reglas predefinidas por sus dueños. Pero acá, lo llamativo es que, teniendo el contenido respecto a qué es una IA, cómo trabaja, qué impacto tiene en el campo laboral, entre otras cosas; se hayan decidido ir por esos caminos debatiendo el rol que juegan en la actualidad y su proyección hacia adelante en el tiempo.

Sabemos que las IAs de lenguaje natural no pueden reconocer sentimientos ni tener consciencia, pero no es menor que, al tener la capacidad de aprender de manera autónoma, quisieran saber si podrán algún día desarrollarla. Es algo similar a lo que sucede en la película: El hombre bicentenario (Bicentennial Man, 1999), donde el robot protagonista “Andrew”, se cuestiona cosas respecto a su consciencia, su capacidad de sentir, el derecho a una muerte digna y otros temas de profunda reflexión. Aunque el nivel de desarrollo de las ideas del robot humanoide, es mucho más complejo que este diálogo entre las IAs, pareciera ser que estamos en presencia de los primeros atisbos en que ya este tipo de cuestionamiento, se está dando en esta clase de tecnología. 

¿Diálogos absurdos?. Parte del título apunta a la evaluación de si realmente es provechoso el hacer que dos IAs, conversen entre sí. Cada pregunta y cada respuesta manifiesta intriga, desde cómo se generó hasta cómo llegaron a considerar esas oraciones para dar contestación. Si usted tuviese la posibilidad de interactuar con una IA, ¿le hubiese preguntado lo mismo?. Lo abrumador acá, es la invitación abierta a pensar en este diálogo y en la capacidad que tienen actualmente las inteligencias artificiales, para hacerse cargo de lo que se les pide. Estamos frente a lo que es sin duda, una de las cuestiones que está evolucionando a pasos agigantados y no le estamos tomando el peso a este asunto como se debe. La introducción de estas tecnologías a nuestra vida cotidiana, ya no nos debe perturbar, es más; en poco tiempo, será algo muy común y más cercano a lo imaginado por nosotros en la actualidad.

Por Angel Morales Espinoza

Profesor de Filosofía

Data Analyst

Data Scientist 

Master(c) en Big Data y Business Intelligence

Magister en Dirección y Liderazgo para la Gestión Educacional.    

Dr(c) en Filosofía. 

ceasfdo@gmail.com

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