Puestos a disposición del Tribunal de Garantía de Rancagua quedaron los dos detenidos tras la batalla campal registrada la jornada de ayer en la Población Diego Portales, donde trabajadores de una chatarrería agredieron a fiscalizadores y carabineros con armas blancas, fierros y objetos contundentes, además de proferir amenazas de muerte.
La situación se dio en el marco de una fiscalización que realizaban funcionarios de la Municipalidad de Rancagua, la Seremi de Minería, CGE y Carabineros, donde se encontraron cables de cobre que habían sido robados del tendido público, desatando la furia de los locales y sus vecinos, quienes intentando impedir el accionar policial dejando como resultado diversos daños en vehículos fiscales y dos personas detenidas.
El mayor de Carabineros de la 3era Comisaría de Rancagua Oriente, Nicolás Calderón señaló que “de acuerdo con una planificación que se tiene en tabla, la Municipalidad de Rancagua; la empresa CGE y el Ministerio de Minería, más personal de Carabineros, al fiscalizar un tercer local correspondiente a una chatarrería se identifican cables que habían sido producto de una receptación, por lo que al notificar a su dueño salen trabajadores, quienes amenazan a carabineros y al resto del personal con armas blancas, fierros y otros elementos más”.
Debido a esto, “se requirió apoyo de personal de Carabineros, donde aumentó el nivel de agresión y producto de esta situación se hizo uso -de acuerdo a nuestros protocolos del uso de la fuerza- utilizando disuasivos químicos y otros elementos más, logrando la detención de dos personas, quienes participaban en estos hechos”, explicó el mayor Calderón.
Como resultado, fueron detenidos: M.P.C.S., por amenazas con arma blanca y delito de receptación; y M.C.J.J., quien mantenía una orden de detención vigente y registra tres reiteraciones policiales, quienes por instrucciones del fiscal de turno, pasaron a control de detención en el Juzgado de Garantía de Rancagua.
